Por Martín Romo

Por si quedaban dudas, el que ayer prácticamente le vino a entregar la llave, y no de su alma, sino del acueducto Independencia al “Gober” Padrés, es el “Presi” Felipe Calderón, al sostener que es una obra de vida o muerte para el futuro de Hermosillo, en lo que es un mensaje para que lo oigan quienes tengan oídos, como dicela Biblia, ya que nunca se la había escuchado tan decidido. En lo que sobra apuntar que significó un anuncio y postura presidencial, que le sonó a campanitas celestiales al gobernador Guillermo Padrés, más cuando Calderón Hinojosa reconoció que sería no solo un absurdo, sino una irresponsabilidad, el dejar sin el vital líquido a una ciudad de casi un millón de habitantes, razón por la cual se mostró a favor de ese proyecto hidráulico del “Sonora SI”. De ese vuelo.

Pero para que quedara más claro que ni el agua de la presa del Novillo, que es desde donde se surtirá a esta Capital, el Mandatario dela Naciónapuntilló que quienes no quieran comprender la importancia y trascendencia de dicho popote acuático, simplemente están fuera de cualquier sentido lógico y ético.