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Grupo Ormi
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13:32
Por Víctor Fonseca Jacques
Cuando Gastón Lozano González se alborotó para entrarle a una competencia electoral por el Partido Acción Nacional, nunca imaginó lo caro que pagaría las consecuencias de su propósito. Quizá un día imaginó que habría enemigos que le pondrían piedras en el camino y que tendría que enfrentarse a situaciones difíciles para tratar de llegar a la candidatura por la diputación federal del 04 distrito. Pero lo que nunca pensó es que su problema principal sería su propia esposa. En los tiempos en que Gastón buscaba afanosamente los apoyos para alcanzar su precandidatura, se dieron intentos por evitarlo, no sólo en las propias filas del panismo, sino también de más allá. Y por esos días surgió un lamentable escándalo, en el que su propia esposa, Carmen Yolanda Quiroz Ontiveros, lo acusaba de marido golpeador, mal padre, incumplido y muchas “lindezas” más, por lo que exigía el divorcio con peticiones económicas millonarias. El asunto pudo haberse ventilado en el mismo seno familiar, pero la señora optó por “invitar a la fiesta” a los medios de comunicación y repartió información a diestra y siniestra. La intención era evidente de más. El propósito era aplastar como cucaracha a Gastón, hubo políticos que aprovecharon la coyuntura, y la dama “se dejó querer”, soltando información de cuanto le preguntaran en la idea de acabarse al novel político. Hasta ahí llegaron los intentos de Gastón. Se lo acabaron.
Por eso mismo, la señora Carmen Yolanda, hoy convertida en candidata a regidora dentro de la planilla de Otto Claussen Iberri, nada le podrá reprochar a Gastón en relación a la carta que éste ha hecho llegar a los medios de comunicación donde le exige que le permita ver a sus hijos, a quienes la mujer dice que él abandonó. El asunto podría revertirse ahora en otro escándalo, pero ahora en contra de la candidata a regidora. No vamos a ahondar en el asunto, porque ya de por sí resulta lamentable, pero creo que hay cuestiones que debieran tomarse en cuenta antes de postular a gente que vive en ese tipo de circunstancias para un cargo de elección popular. Mucho se ha criticado el nivel de algunas personas que llegan a regidores, como para seguir llevando gente de ese tipo a una encomienda tan delicada como esa.
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