Por José Luis Parra 

En su próxima visita a Hermosillo, programada para el 9 de noviembre, Manlio Fabio Beltrones asumirá a plenitud su rol de priista número uno de Sonora, a la vez que sellará su alianza con el gobernador Guillermo Padrés. Los acuerdos que se tomen durante su estancia podrían alcanzar hasta las primeras negociaciones sobre la candidatura a gobernador para el 2015. El antecedente de esta alianza sigue siendo el centro de comentarios entre la llamada clase política: Por primera vez un gobernador utiliza el escenario de un informe para declarar a la empresa ganadora de una licitación, como Canoras, propiedad de “El Sahui” Salazar, gran amigo de Beltrones.

Esta alianza Padrés- Beltrones se reflejó en los hechos, con el albazo que dio el gobierno para colocar a Sebastián Sotomayor en la presidencia del Supremo Tribunal de Justicia. Aquí hay un hecho que llama la atención de propios y extraños, como la tibieza que distingue a Samuel Moreno Terán para defender los intereses del PRI en este asunto.

Y es que la estrategia final de esta operación política que agarró a los priístas fuera de base, se registró en el domicilio particular del secretario particular del gobernador, Agustín Rodríguez. Allí se dieron cita el propio gobernador Padrés, quien no se quedó al término de la reunión, el anfitrión Agustín Rodríguez, Roberto Romero, Javier Neblina, Mónica Paola Robles Manzanedo ¡y Samuel Moreno Terán!. El asalto al Poder Judicial se planeó aquí con lujo de detalles. De esa acción, Samuel ya sabía los puntos finos. Todos los recovecos legales los había consultado con el abogado Adolfo “El Conito” García Morales. ¿Cuál fue el precio?

Si la resistencia tricolor va en serio, irán con todo en la controversia constitucional, porque este juicio se sale del control del Gobierno de Sonora. Ahora bien, si la alianza Padrés- Beltrones incluye la gubernatura de Sonora para el 2015, el menos beneficiado sería Ernesto “El Borrego” Gándara. Y elevaría los bonos de Claudia Pavlovich, "Toño" Astiazarán y del propio Samuel Moreno. Si finalmente el compadre priista del gobernador panista fuera el elegido, Padrés pondría un candidato azul a modo.