Han empezado los llamados “posicionamientos partidistas” sobre la propuesta de Presupuesto enviada al Congreso por el presidente Felipe Calderón.

Ajustaremos las prioridades, dicen los priístas. No pasarán, dicen los panistas. No sean irresponsables, reclaman los economistas privados y oficiales. Escarceos de uno de los procesos más políticos del Congreso: el del Presupuesto federal.

Fuegos fatuos. Si el diseño presupuestal es el de siempre, nadie alterará las grandes variables macroeconómicas. No en el hostil entorno internacional de hoy.

¿Qué ahoga a las finanzas públicas? Algunos afirmaron ayer que las pensiones ahogan a las finanzas públicas. Un simplismo tramposo.

Las pensiones se han convertido en una carga por el cada vez más lento ritmo del crecimiento de la economía mexicana. A menos crecimiento, menos empleos y menos recursos para las pensiones.

Las finanzas públicas se ahogan por el dogmatismo económico, tan grave como todos los fundamentalismos.