Steve Jobs hizo historia. No sólo con la compañía que fundó en 1976 al lado de Steve Wozniak, en Palo Alto, California. No sólo por mantener un modelo de negocio que nunca dudó en producir, al mismo tiempo, hardware y software. No sólo por volverse el líder de la empresa más rentable de Estados Unidos. Hizo historia porque revolucionó en todo lo que propuso.

Este 24 de agosto, Steve Jobs renunció a la dirección ejecutiva de Apple Inc. bajo el argumento de que “ya no puede cumplir con sus deberes y las expectativas” del cargo. Deja definitivamente el puesto con la camiseta del hombre que modificó paradigmas de negocio, de la tecnología y del entretenimiento.

A 35 años de haber lanzado la primera computadora Apple, Jobs hizo que la manzana blanca tuviera un valor de 340,000 millones de dólares, equivalente al de 32 bancos de Europa y superior a la deuda soberana de Estados Unidos.