Una pesadilla que no está nada mal. De hecho está muy buena. Aunque va a decepcionar a los fans más rabiosos de Tim Burton.

Es decir, la nueva adaptación de Alicia en el país de las maravillas, dirigida por Burton, es una película difícil de reducir a unas cuantas palabras.

Hay que verla por varias razones

Primera razón: es una gran adaptación, cosa cada vez más escasa. Usualmente, cuando sabemos que una cinta está “basada en”, lo que se espera es una predecible ilustración en movimiento de la obra en cuestión.

Tim Burton y la guionista Linda Woolverton (escritora del El rey León) decidieron tomar la otra ruta, la mejor para una adaptación: usando de pretexto no sólo “Alicia en el país de las maravillas” sino también “A través del espejo” y haciendo guiños todo el tiempo a la obra literaria completa de Lewis Carroll, crearon una fantasía con vida propia.

Aquí Alicia (buen trabajo de la debutante Mia Wasikowska) no es una niña, es una joven mujer de 19 años a punto de ser encarcelada en un típico matrimonio victoriano: conveniente, infeliz y mortalmente aburrido. Agobiada, en su fiesta de compromiso Alicia escapa, cae en una madriguera y el cuento comienza...