Por Martín Romo

Con el que sí que se hizo valedero aquello del, ¡mucho ruido y pocas nueces!, o en este caso ventas, es con la segunda edición del llamado programa ¡Buen Fin!, creado porla Concanaco, cuando era presidida por el ahora diputado federal cajemense, Mario Sánchez Ruiz, porque si bien no pasó desapercibido, tampoco hubo las compras de pánico que se esperaban. De ese vuelo. Con lo que se vuelve a poner de manifiesto lo del ¡cría fama y acuéstate a dormir!, por la mayoría de los consumidores no creer en esa versión a la mexicana del llamado “viernes negro” y “día de acción de gracias” de los gringos, que aquí han querido copiar con tal de incentivar el consumismo interno,  y que allá marca en inicio de las ventas de la temporada navideña, por aquí no pasar de la mera pantalla.

Al ser obvio que nomás ponen ofertas gancho, pero en general mantienen sus precios normales o altos, de ahí el porqué no tuvieran el eco esperado, como tampoco hubiera el adelanto de los aguinaldos, al trascender que a los únicos que se los anticiparon, es a los empleados federales, porque a los municipales y estatales, hasta para dárselos en la fecha normal están batallando pa´ completarse.

Lo que traducido a números significa que no hay dinero en la plaza o no tanto como se suponía, aunado a que los que para nada mostraron un liderazgo para promover un estrategia que terminara de atraer al grueso de los compradores, son los “representantes” dela Canacoy Canacope, Gustavo Claussen y Marco Antonio González Cubillas, de ahí que más bien aprovecharan para liquidar sus saldos o mugreros. O séase que no pasa de ser una mera simulación en la que incurre el comercio local, por no ofertar lo que a la gente le falta...