Por Martín Romo 

El que sigue demostrando más seguridad que ni Barack Obama, de cara a  las elecciones de mañana contra Mitt Romney, es el secretario de Economía Moisés Gómez Reyna, al anunciar que ya están en los últimos detalles para arrancar con una de las megas obras del actual sexenio padrecista, como es la construcción del Gasoducto Guaymas-Topolobampo. Así el avance. Con lo que se confirma que “El Moís” Gómez Reyna “anda a todo gas”, a la hora de ir del dicho al hecho, por ya ser cuestión de tiempo para que la empresa Sempra Energy, que es la que pondrá manos a la obra, cumpla con todos los papeleos de rigor, como son los permisos, estudios y análisis que se tienen que hacer para esos casos, cosa en lo que el Gobierno del Estado ha sido un facilitador. Pues la idea es que no existan peros ni obstáculos para los inversionistas, sobre todo cuando se trata de proyectos como el que está a punto de hacerse realidad y que se pronostica que vendría a detonar el rubro económico, por el impulso a la actividad industrial, de ahí que se de por descontado lo vaticinado, tocante a que si otra cosa no pasa, en los próximos días estarían dando más señales al respecto.

Toda vez que el funcionario orgullo de Bacum ha probado ser un hombre de palabra o de esos que habla cuando ya tiene los pelos en la mano y con todo y burra, de ahí que la aludida inversión e infraestructura gasera ya puede irse contando entre los aciertos o progresos de la gestión del gobernador Guillermo Padrés, que por cierto ayer andaba de gira o tocando puertas por el D.F.