El diputado federal Rogelio Díaz Brown, originario de Cajeme, fue asaltado por un solitario hampón que le quitó carro, cartera y celular, cuando llegaba a una reunión en la ciudad de México donde trataría con otros legisladores la situación que priva en torno a la Tribu Yaqui.

Más allá de seguir “grillando” con la etnia Yaqui, Díaz Brown optó por denunciar el ilícito y en su declaración relató en su denuncia que a las 9 de la noche del 27 de septiembre, llegó a un evento de la Comisión Indígena del Congreso y una persona le exigió las llaves del carro, cuando se negó a entregarlas, el ratero sacó de un maletín que portaba un ametralladora, de las llamadas, “Uzzi” y le dijo que si no se quería morir hiciera lo que le ordenaba.

Díaz Brown pensó que “así por las buenas sí” y le entregó las llaves. El maleante también le pidió la cartera y el celular que estaban en el interior del vehículo y lo dejó a pie, sin dinero e incomunicado.

Bueno, amigos que vivieron en Cajeme nos dicen que esto del asalto es lo más trascendente que ha informado Roger Díaz Brown y como siente que se le mueve el tapete para lograr la candidatura a la alcaldía, optó por publicitar el “martirio” que le toca vivir en la Ciudad de México, quien quita y así logre subir un poco sus bonos que vienen a la baja.